Trastornos relacionados con traumas

 

 

Los trastornos relacionados con traumas surgen de la experiencia previa a un evento traumático o muy estresante para el individuo, en algún momento de su vida, y cuyos síntomas se pueden entender en un contexto de miedo y ansiedad excesivas. Se ha comprobado que muchas personas que han estado expuestas a un evento así muestran síntomas anhedónicos (dificultad para experimentar placer en diversas situaciones) y disfóricos (estado asociados a un malestar ambiguo y no concreto hacia algo), exteriorizados en forma de enfados u hostilidad o síntomas disociativos.

 

De todos los trastornos relacionados con traumas, dos son los que aparecen en:

 

  1. La infancia (trastorno de relación social desinhibida y trastorno de apego reactivo)
  2. Y tres, en la etapa adulta (trastorno de estrés postraumático o TEPT, trastorno de estrés agudo y los trastornos de adaptación).

 

 

  • Si el agente estresor es muy extremo (abuso sexual, negligencia, maltrato físico, catástrofes naturales, terrorismo, etc.) podemos empezar a manifestar síntomas que se pueden encuadrar en trastornos como el trastorno por estrés postraumático o el trastorno por estrés agudo.
  • Si estos acontecimientos no son tan fuertes, pero sí más prolongados en el tiempo (cambio de domicilio, pérdida de trabajo, separación), pueden producir síntomas menos intensos que van a requerir que pongamos en marcha una serie de estrategias de afrontamiento para poder adaptamos a esos cambios: hablaríamos entonces de trastornos de adaptación.

 

 

 

 

 

 

Qué es un trauma

¿Qué factores determinan la aparición de un trastorno relacionado con trauma?

 

 

Para que se desarrollen estos trastornos es necesario que se dé el acontecimiento traumático o estresante en una persona que sea vulnerable biológicamente (hiperactivación o hipersensibilidad) y también psicológicamente (cómo interpreta y vive esa situación). Estos trastornos aparecen con más frecuencia en víctimas vulnerables (o que actúan así) pero también pueden aparecer en personas sin ningún factor predisponente, sobre todo cuando el suceso resulta muy traumático. 

 

En cuanto a los factores que intervienen en el trastorno, podemos destacar:

 

  • Factores predisponentes (psicopatología previa personal o familiar, temperamento, vulnerabilidad, estrés acumulativo, etc.)
  • Factores precipitantes (el suceso traumático, sus características y cómo lo vive e interpreta el sujeto)
  • Factores de mantenimiento (sentimientos de culpa desarrollo del combinación intentos de racionalizar lo ocurrido, factores de condicionamiento, apoyo social, estilos cognitivos. expectativas y atribuciones).
  • La intensidad y la duración del estresor están relacionados directamente con la aparición del trastorno

 

Este tipo de trastornos pueden aparecer a cualquier edad, pero sí es importante destacar que los cambios biológicos, como los de la adolescencia, puede ser un factor determinante. El entorno social del individuo puede funcionar como medida de apoyo y protección ante las reacciones de estos pacientes. 

 

 

 

Versión para imprimir | Mapa del sitio
© Psicología Enrique Santos 604 814 859 / 659 827 222 info@psicologiaenriquesantos.es

Llamar

E-mail

Cómo llegar