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El trauma es una herida psicológica que puede ser provocada por una gran variedad de situaciones y cuyos efectos nocivos pueden prolongarse a lo largo de la vida de una persona de forma indefinida.
Estos sucesos traumáticos son eventos que tienen el potencial suficiente para generar un sufrimiento humano y sobrepasar los mecanismos de defensa que empleamos de forma no consciente para defendernos y protegernos del daño. Estos sucesos, por lo general, son acontecimientos vividos que no son habituales para un ser humano y producen abreacciones (es decir, reacciones emocionales muy intensas), así como potentes reacciones físicas para quien vive el suceso. Entre las situaciones de potencial trauma podríamos enumerar algunas de ellas:
Son algunos de los ejemplos de aparición de trauma. Si quieres saber más sobre EMDR, trauma y TEPT, puedes descargarte este audio del programa de radio "El diván".
La memoria es un aspecto fundamental de la salud y la patología (Shapiro, 1995, 2001). Cuando los niños o niñas sufren malos tratos, negligencia, abusos, enfermedades, hospitalizaciones o diferentes estresores, estas experiencias dejan huella en el cerebro en forma de redes neuronales disfuncionales y desadaptativas (Solomon y Heide, 2005). La memoria es una parte fundamental en la re-experimentación de los eventos traumáticos; dichos recuerdos están formados por elementos sensoriales, emocionales y fisiológicos; y pueden generar gran angustia y activación (DSM 5, APA, 2013). Esto quiere decir que, el daño psicológico y emocional se almacena en el cerebro, como una memoria desconectada, si no se ha resuelto adecuadamente en el momento del suceso, comprometiendo el desarrollo psicológico y emocional futuro (Shapiro, 2009).
Las heridas y los traumas psicológicos tempranos (también relacionales o de apego) previos al desarrollo de las estructuras cerebrales que integran y almacenan esa información, como el hipocampo, se mantendrán en un nivel inconsciente. Los síntomas posteriores están relacionados con la dificultad de procesar la información de un cerebro inmaduro, porque las experiencias han ocurrido con anterioridad al desarrollo de dichas estructuras cerebrales (18 - 24 meses), o bien porque el trauma ha desregulado el sistema, inhibiendo el funcionamiento adecuado de dichas estructuras (Cozolino, 2011;Levin, Lazrove y van der Kolk, 1999;Siegel, 1999).
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